me hago a la mar...
en tu búsqueda
incansable peregrino,
siguiendo la luz de tu sonrisa
en el poniente
solo
mi palpitante brújula me orienta,
no tengo un mapa
en donde ubicarme
¿y quién podría dibujarlo sino yo?
desfallezco muchas veces
hambriento de tu dulzura
que todo lo llena
y me da fuerzas
y aliento
para continuar
buscando el refugio de tu cuerpo
y la tibieza de tu ser
No hay comentarios:
Publicar un comentario